lunes, 14 de octubre de 2013

La memoria.






La memoria no es baúl, ni pozo, ni fotografía.
La memoria es un espejo. A veces, roto.
La memoria es el cuerpo despellejado ante el espejo roto.
La memoria es la agridulce imagen del corte penetrando nuestra carne.
La memoria es todo lo que no quisimos ser.

domingo, 7 de julio de 2013

Tenemos que hablar.





Tenemos que hablar
que ya no somos niños y tenemos que arreglar este desastre
que las noches ya son trámite y la espera insoportable.

Tenemos que hablar
y contarnos cuánto nos queremos
que el tiempo pasa y los silencios duelen
los esperos y ojalases ya se han agotado

[Pase Srita Pérez por pasillo 22]

Déjame que te cuente, entre labio y labio
que han pasado los años
por mí, por ti y por todos
que le hemos ganado la batalla al tedio y al miedo.

Déjame que te cuente, que no tienes que dejar de mirarme nunca
que Barcelona nos podrá salvar, si queremos.

Vengo a pellizcarte.

[Audio]





Es domingo, tengo tiempo para pensar.

Hoy estuve pensando en gestos que probablemente no recuerdes. Como la primera vez que te vi, a los pies de una escalera mecánica en una capital del mundo o cuando me descalcé en tu sofá. Era el verano más terrible de todos los tiempos.

Recuerdo todas esas cosas que no tuvimos. El tiempo, por ejemplo, no nos dejó tomarnos con calma las últimas horas de la tarde. Y cuántas fotos se habrán perdido por no haberlas tomado.

Te veo sonreír en las fotos, sé que no eres feliz. Me pregunto si te habrás preguntado por mí en las últimas horas. Si recuerdas el olor de las sábanas en las que solíamos dormir. Si llevas un libro cerca del corazón.

Voy a pellizcarte, el alma si puede ser. Aunque sea por última vez.

sábado, 20 de abril de 2013

El exterminio.



[Audio]

se atascan los suspiros en la tráquea y no puedo respirar.
no hay oxígeno, no es necesario, ni gravidez en los órganos.
la sangre se agolpa, la oigo trotar arriba y abajo:
fría, un glaciar líquido que galopa por mis entrañas.
[sin destino].
los segundos atraviesan la piel en forma de mil agujas
tortuosas
torturadoras
terribles
atropellan las palabras que no se dijeron en las crudas falanges
escenas pasadas entran en espiral, en bucle, cohabitan con el terror
la casa deshecha, arañas anidan en mi boca,
y sólo siento vacío
incredulidad
ausencia corrosiva
furia
taquicardias
y ganas de morir.

el planeta se ha despolarizado
los animales vagan desorientados
los girasoles no viran al son del astro rey
todas las letras tienen sentido

es la devastación de la certidumbre.
Papá, has muerto.


viernes, 8 de marzo de 2013

Reconversión y materia.






Me iré lejos, a la orilla de lo natural,
el lugar antaño conocido y respetado
como sólo la historia puede hacerlo.
Allí, quedaré totalmente desnuda. Y respiraré.

Entonces, mis brazos se cubrirán de denso vello,
mis débiles músculos tornarán en toscas piernas,
la fina y delicada piel desaparecerá:
Seré hombre, y valiente, y huiré.

Cuando haya vuelto al inicio de la materia,
el hombre rudo también desaparecerá,
creciéndole escamas y branquias y aletas,
menguarán sus anhelos y angustias.
Regresaré río abajo, alcanzaré el mar,
-mi amante, mi deseo y obsesión como pez.-
no habrá raciocinio ni lamentos ni amor
ni lágrimas ni ternura ni sol.
Sólo supervivencia.

Y, en un instante, volveré.
Seré otra vez mujer, dichosa y calmada,
enlazada entre dos piernas y dos brazos
en el calor de un regazo
hundida entre dos ojos y dos labios,
resguardada en otro nombre.
Amamantaré la vida, albergaré el placer
seré primitiva y evolución
ternura y escarmiento
castigo y entendimiento
abandono y perdón.

Y ya no me marcharé, si me colmas de amor.

martes, 5 de marzo de 2013

De mí sin ti.





[Audio]


Las mañanas tienen incógnitas.
No ponen nada interesante en mi ventana.
Me corto con vasos rotos en las cuatro patas de la cama.
Uno más uno vuelven a ser sólo dos.
Sinsentidos dominicales de sofá y vacío inerte.
Media lista de la compra.
Brisa de invierno azota el caminar obsoleto.
Los superhéroes están de vacaciones.
Vinagre en el vino.
Hay carcoma en los cimientos.
La ensaladilla rusa callada y sobria.
Intenciones apaisadas en el tambor de un revólver lingual.
Los barcos marean.

Y marcadas en madera, todas las cosas que no dijiste que serían
                                  de mí sin ti.

lunes, 4 de marzo de 2013

Vapor de él.





[Audio]

Muselina.
Sus ojos eran muselina deslizada entre mis dedos, entrelazada con la garganta de la que brotaban cascadas de miel para los oídos. Notas inaudibles, latidos secos, frágil y resbaladiza la ternura del que ha vivido el carnavalesco horror de los tiempos, la historia de la lumbre y el calor del buen pasado. La piel colgaba del barranco óseo en el filo de la boca y, contando con el vuelo de las palomas, acabaron los secretos por escribir su carta de suicidio.

Con su último hálito, se escapó la inocencia, la dulzura de los rayos de verano, las briznas quemadas, las noches estrelladas, la infancia y la risa. Todo desapareció convertido en vapor de agua.

No existe día sin nostalgia desde entonces. Éramos.




" - No entiendo el arte.
- No debes entenderlo, sólo disfrutarlo. "

lunes, 25 de febrero de 2013

Isomorfo









Te nombraría Robespierre si me cortaras raciocinio, 
si me hicieras sólo tuya, si te llamaras siempre mío 
si estableciéramos un contrato de esclavismo. 

Podría convertirme en nada, elevarme, flotar
ser -de repente- aire fantasmal
pasar en un suspiro. Y respirar.

Sin intención, haces el milagro de ser otro,
serpenteas entre imposibles y basura galáctica;
yo sólo necesito que seas el mismo.


Pero no.


lunes, 4 de febrero de 2013

Hay creación.




Todas las horas son sábado por la tarde. 
Sosiego, calma, sentir que vivimos en un eterno viaje.
Aparece lo inesperado, discutimos sobre la creación, 
la luz,el cabello blanco. Y nos reencontramos.


(hasta con los ausentes hay creación)

Tu me manques




Audio


Echo de menos las mañanas con las sábanas calientes,
que el sol me despierte,
la luz cegadora de una mañana cualquiera de noviembre,
y las gaviotas.

Echo de menos el tormentoso arrullo del mar
aunque todo comience a ir mal,
que la humedad me despeine sin cesar,
el torbellino de viento, el azahar.

Echo de menos a los vivos y a los muertos,
el azul que invade cada rincón de aquel lugar,
cómo Julia me miraba antes
y después de pintar.

Echo de menos llegar a casa, en silencio,
tropezar con unos ojos amigos que invitan,
un vino y un cigarro que lo entienden,
y amar.

Echo de menos correr descalza,
desatarme en unos brazos honestos,
aludes de fuegos de artificio,
volver a conocerse en palabras de otro.


Echo de menos estar agotada de vivir,
enredarme cada instante en los años pasados,
la salvación de un Dios que no hace falta,
el presente y la calma.




sábado, 2 de febrero de 2013

Las palabras, el amor y Borges.

Me imagino a Borges renegando de sus amantes.
Me lo imagino, con los dedos entrelazados - como solía- mirando la pared fronteriza con su butacón, mientras con una mueca en perfecto acento bonairense desdeña su inútil existencia. "Meras piezas de negociación", le gustaba decir, seseante, desagradablemente sensible.

Lo que pocos saben es que Borges murió enamorado, más allá de sí mismo, de la literatura, de su infancia, de su madre, de sus noches de mate en el porche. Más allá de toda su vida, murió enamorado, como sólo los literatos pueden enamorarse: en el silencio más absoluto, en el escondite más abrupto, en su piel, en Braïlle.



miércoles, 23 de enero de 2013

Cartas desde el exilio.



[Audio]


El exilio no es un lugar exacto ni es una situación política. El exilio, mi buen amigo, es el vacío, la añoranza, la lejanía y un dolor de corazón. No se trata de dónde se halle el cuerpo, con sus manos y sus pies cansados, el destino de las cartas mensuales, o la mezcla de impaciencia y miedo que se tiene ante una nueva aventura -fuere o no voluntaria-. Se trata de las punzadas del alma por ausencia.

De esta manera, por mucho que no quisiera que así fuera, me encuentro en el exilio. De mi propia vida, de mi cuerpo, de la voz, que se hace insostenible. Dejaré pasar el tiempo, quizá los años, pensando que, algún día, esta batalla civil pueda quedar resuelta o hayamos muerto en el camino.


martes, 22 de enero de 2013

Microrelato #4




[Audio]

Era un buen hombre, recto, amable, palanca del planeta.
Perdió el juicio, se convirtió en piedra y ahora, huraño, implora un nombre de mujer.



miércoles, 16 de enero de 2013




[Audio]

Cumulonimbus, antropomorfos, ajedrezados
el delicado artesonado de la historia.
Bajo ellos, la celosía del mundo
que no quiere verse observada.

Aparece en el conglomerado humano,
una gran masa única de sangre y músculo,
un mortero de nombre y apellido
una argamasa arquitectónica impenetrable.

En vertical, primero el ábside de la obra,
contenedor de ideas y enjaulada cabellera,
para ordenar al segundo, el adarve,
que abra sus puertas por encima del abdomen.

Sin salida, hechizado, noctámbulo y morisco,
sólo deja que se cuelen unos labios
que eternizan con sus mieles y aceites
los deleites de su pecho encandilado.

En la tercera fase de construcción
el velado y caliente friso que le atrapa,
que huele a primero de julio en La Habana,
que la vida crea y recrea en sus núcleos.

Y bajando por las columnas eslavas
le rinden pleitesía de rodillas
antes de alcanzar la lauda
que le une a las raíces y a su vida.


martes, 15 de enero de 2013






Cortina en gasa blanca.
Tu hábitat en mi vientre.
Y ya no sé qué pasa.



La ciudad.




Punto. Raya. Punto.
Línea sobre línea,
un Dios desarbolado,
son las mieses urbanitas.

En el campo de su estómago
siembro nuevas cosechas
de negro sobre blanco
de alquimia en papiro
de retórica dormida.

Se ha pausado el oxígeno,
estática figura
congelado lumínico.
Ahora parece una fotografía
o un mal recuerdo.

Y no miro, le juro que no miro.
Que entre ceja y ceja hay una imagen
rota en esta tarde de domingo.


lunes, 14 de enero de 2013

(a) mar.




[Audio]

La inmortalidad de las huellas
que con pasión se reparten
entre tus manos vespertinas,
es antigüedad.

En el paladar te guardo
ríos de tinta perlada
y para las catástrofes de tu espalda
ven, y enrédate en mi falda.

El mecer de las olas
el humo nocturno
agujeros en la cama
cristales rotos en el alma.

Que se desvanece el espíritu
de los sonetos inacabados en pluma
de los cabellos robados
de la inocente oscuridad.

Es martes en tu lengua
diez segundos en la alarma
en mis pies granuladas notas
de tus canciones de piratas.